Las Juventudes Socialistas condenan las declaraciones del arzobispo de Oviedo sobre las políticas de igualdad en Asturias

La organización juvenil critica las duras declaraciones del arzobispo de Oviedo, Jesús Sanz Montes, referidas a las políticas de igualdad llevadas a cabo en nuestra región. En opinión de su secretario general, Unai Díaz, el máximo representante de la Iglesia Católica en Asturias no está en situación de dar lecciones sobre igualdad. “Sólo hay que ver el papel que desempeña la mujer en el seno de la Iglesia, además las palabras vertidas en su carta semanal demuestran prejuicios injustificados y un total desconocimiento del objetivo de las políticas de igualdad y contra la discriminación de género que se están llevando en Asturias”.

Las políticas de igualdad cuentan este año con una cuantía global de 2.284.267 en los Presupuestos Generales del Principado de Asturias. La principal cuantía de este dinero (1.329.435) se destina al apoyo a las víctimas de malos tratos, mayoritariamente las mujeres y sus hijos e hijas; a favorecer el acceso laboral y desarrollo profesional de las asturianas, avanzando en la corrección de las múltiples brechas de género que presenta el mercado de trabajo, y apoyar a las instituciones públicas y las organizaciones de mujeres que trabajan en su favor.

Las JSA lamentan que la Iglesia, que siempre se erigió en defensora de los colectivos más vulnerables, continúe vilipendiando las únicas políticas existentes dirigidas a la igualdad real entre hombres y mujeres en la sociedad y a la lucha contra la discriminación de la mujer y violencia de género. En palabras de Díaz, con el uso de expresiones tales como que “la mujer es contemplada como ayuda adecuada y solidaria con el varón, como ser correspondiente con él, en una comunión de origen y destino” estamos haciéndole un flaco favor a un colectivo que lleva ya largo tiempo discriminado y castigado por su condición femenina. Por todo ello el líder juvenil pide a Monseñor Jesús Sanz, respeto a las instituciones democráticas y que se documente mejor antes de cuestionar políticas que aumentan derechos y protegen a la ciudadanía. “Algunos todavía viven en el cesaropapismo. Que respeten la legitimidad de los representantes políticos, que ellos sí han sido elegidos democráticamente por los ciudadanos y ciudadanas”, sentencia Díaz.